Este chaleco de pelo sintético que ya se había quedado pequeño, hemos visto que encajaba perfecto de contorno con la talla actual de perímetro de cabeza de Lucía y que tenía tejido suficiente para poder cortar un gorro de tipo cosaco, así que nos hemos animado a confeccionarlo.
Si la idea de hacer este gorro os gusta, pero no tenéis o no queréis utilizar como base un chaleco. No hay problema. Bastará con que compréis 30-40 cms de pelo sintético y de tejido de forro para sacar las dos piezas que lo componen.
Pasos a seguir:
- Cortar una tira de unos 10-12 cms de anchura y de largura el perímetro de la cabeza de quién lo vaya a lucir (para 5-10 años 54cms).
- Trazar un círculo, cuyo perímetro sean esos mismos centímetros.
- Cortar en tejido de pelo y forro el círculo obtenido.
- Descoser los costados de la tira, si habéis usado como base un chaleco.
- Y coserlos entre sí. Los de forro por un lado, los de tejido de pelo por otro, dejando los derechos de las telas hacia dentro.
- Una vez cosidas, las colocamos del derecho.
- Unimos con alfileres, la parte superior de pelo del sombrero (el círculo) con su correspondiente tira, dejando los derechos de nuevo hacia dentro.
- La cosemos a máquina.
- Y repetimos el proceso con los forros, pero esta vez dejando una pequeña zona sin coser, para poder dar la vuelta al sombrero por ella.
- Una vez pasada la costura a máquina, ponemos la prenda del derecho y cerramos la abertura que queda con unas puntadas a mano o bien, con una costura a máquina, ya que quedará en una zona del interior, muy discreta, donde apenas se notará.
Nosotras hemos aprovechado el bajo del chaleco, para así tener ya cosido el forro al tejido de pelo en el extremo inferior de la pieza.
Para ello, doblar un papel en cuatro partes ( con un Din A4 tenéis suficiente).
Marcar desde el punto central de las cuatro dobleces el radio tanto en altura como en anchura. Para calcularlo, debéis dividir el perímetro por 2π ( En nuestro ejemplo, que es una talla M de niña sería R= 54 / 6,28 = 8,6 cms)
Dibujar el arco con un compás o si no tenéis uno a mano, con un cuenco o plato de esa medida.
Quien parta de cero, que coja las tiras de forma individual y cosa estos costados lo primero, antes de unirlas entre sí, para que le resulte más cómodo.
Para ello, viene muy bien marcarse primero con alfileres los cuatro puntos que dividen el círculo en partes iguales.
Y así, poder encajarlos los primeros, con los cuatro puntos que dividen la tira en esas mismas partes.
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